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Sra Bouayach llama de la capital Accra (Ghana) a la elaboración de una hoja de ruta africaina para proteger los derechos humanos en el continente

En el marco de su participación en la Conferencia bienal de la Red de Instituciones Nacionales de Derechos Humanos en África, la Presidenta del Consejo Nacional de Derechos Humanos (CNDH), Amina Bouayach, llamó ayer, miércoles 18 de octubre de 2023, en Accra (Ghana) , a desarrollar una "visión común" y "unirse en torno a una hoja de ruta ambiciosa" que pretende proteger los derechos humanos y garatizar su implementación efectiva, en las transacciones comerciales de las empresas y corporaciones y multinacionales en el continente africano.

El horizonte 2030 es la perspectiva propuesta por la señora Bouayach a sus homólogos del continente africano, como objetivo para la implementación efectiva de los Principios Rectores sobre Empresas y Derechos Humanos, siendo una norma mundial para prevenir y abordar los impactos negativos de las actividades empresariales sobre derechos humanos.

Las Instituciones Nacionales de Derechos Humanos (INDH) independientes (acreditadas con el estatus “A”), añade la Sra. Bouayach, “pueden desempeñar un papel esencial e importante a la hora de alentar a las empresas y corporaciones multinacionales a proteger y respetar los derechos humanos, a comprometerse a respetarlos , a garantizarles el derecho de recurso y permitirles acceder al mismo; además de garantizar la implementación efectiva de la “debida diligencia” en materia de derechos humanos.

La Sra. Bouayach identificó cuatro áreas principales en las que las INDH de África pueden participar: defender y promover la diligencia debida que garantice la protección de los derechos humanos, el derecho al medio ambiente y la protección de las víctimas contra posibles violaciones; Promover el compromiso con la realización de principios regionales vinculantes para las empresas africanas (tal como se adoptaron en el área de la Unión Europea); Establecer mecanismos de reparación para las víctimas, tramitar denuncias e investigar posibles violaciones con miras a garantizar la rendición de cuentas de los empresarios y las corporaciones multinacionales; intercambiar experiencias y buenas prácticas de empresas que han implementado el principio de “debida diligencia” en materia de derechos humanos.

Nuestro compromiso, concluye Bouayach, debe ser fuerte y ambicioso para desarrollar una visión africana común con vistas a proteger los derechos humanos y garantizar el derecho de recurso a las víctimas y el compromiso de las empresas y multinacionales de respetar los derechos y la diligencia debida.